Ciudad de Guatemala, 17 sep (EFE).- La Misión de Solidaridad de Bélgica en Guatemala inició este martes una visita al país para trasladar la sentencia de cadena perpetua que un tribunal de la ciudad de Lovaina dictó en diciembre de 2023 en contra de cinco exmilitares por el asesinato, desaparición y tortura de tres sacerdotes belgas en el país en 1980, durante el conflicto armado interno (1960-1996).
La delegación integrada por seis representantes de la misión denominada Guatebelga, busca difundir la sentencia y darle el seguimiento judicial y político que merece para fortalecer la lucha por los derechos humanos y contra la impunidad, según indica un comunicado de la organización.
Reuniones con grupos de sociedad civil, universidades, así como con entidades del Estado es parte de la agenda que tendrá esta misión del 17 al 22 de septiembre.
El 14 de diciembre del año pasado, un tribunal penal de la ciudad de Lovaina encontró culpables al general y exjefe del Estado Mayor del Ejército Benedicto Lucas García, el exministro de la defensa Ángel Cabrera, el exministro de Gobernación Donaldo Ruiz, al exjefe de inteligencia Manuel Callejas y al exjefe policial Pedro García Arredondo del asesinato y otros crímenes cometidos contra cuatro sacerdotes de la Congregación del Inmaculado Corazón de María.
El Ayuntamiento de Lovaina, Bélgica, es un edificio histórico en la plaza Grote Markt . Construido en un estilo gótico tardío entre 1448 y 1469, es famoso por su arquitectura ornada, elaborada con detalle festonado #arquitectura pic.twitter.com/8ApuoLjdl1
— Araceli Rego (@AraceliRego) September 22, 2023
Testimonio
De acuerdo con testimonios, el sacerdote Walter Vordeckeres fue asesinado por las fuerzas armadas el 12 de mayo de 1980 frente a la parroquia de Santa Lucía Cotzumalguapa, Escuintla.
Además, el religioso Ward Capiu fue asesinado el 22 de octubre de 1981 en San Lucas Sacatepéquez donde se desempeñaba como misionero y Serge Berte fue desaparecido en enero de 1982 en la ciudad de Guatemala, lo llevaron a un centro clandestino de detención, fue asesinado y hasta la fecha su cuerpo sigue sin aparecer.
Mientras que el también sacerdote Paul Schildermans fue detenido arbitrariamente el 4 de enero de 1982, fue torturado en una cárcel clandestina y liberado dos días después.
👆Ninguno de los militares y exfuncionarios guatemaltecos estuvo presente en el juicio.
El jurado popular del Tribunal de lo Penal de Lovaina los encontró culpables de 19 cargos de crímenes contra la humanidad cometidos en contra de cuatro misioneros.
📷@ImpunityWatchGt pic.twitter.com/O7VmxFgEnv
— Prensa Comunitaria Km169 (@PrensaComunitar) December 14, 2023
Dos décadas buscando justicia
Las familias de los misioneros asesinados iniciaron un proceso penal en Bélgica en 2001 contra los altos mandos militares de Guatemala que se encontraban activos durante la comisión de los crímenes, amparados en la ley sobre la Represión de Violaciones Graves al Derecho Internacional Humanitario, que permite juzgar delitos cometidos contra ciudadanos belgas en cualquier parte del mundo.
El juicio celebrado en diciembre pasado no contó con la presencia de los acusados debido a que actualmente se encuentran presos en Guatemala bajo condenas por otros delitos de lesa humanidad y algunos de ellos, como el general Lucas García, aún tienen juicios pendientes por delitos como genocidio cometido contra pobladores indígenas del norte del país.
De acuerdo con la organización Guatebelga, esta visita también es un homenaje y agradecimiento de las familias de las víctimas con los guatemaltecos que decidieron declarar en el juicio ante un jurado de 12 ciudadanos belgas.
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