Ciudad de Guatemala, 17 jun (AGN).- Durante el segundo Congreso Regional Penitenciario se presentaron diversas experiencias positivas que muestran cómo se gestionan las prisiones en varios países de la región.
Panelistas de naciones latinoamericanas compartieron sus enfoques y estrategias exitosas, destacando los avances en Guanajuato, México; Guatemala, y Venezuela.
El Segundo Congreso Regional Penitenciario dejó mucho aprendizaje e intercambio de experiencias entre los representantes de los países invitados. El Secretario @mrabanales_sbs se dirigió al público en la conferencia de cierre y esto fue lo que dijo: https://t.co/HTdg42UhUm pic.twitter.com/58cTq2iORS
— Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia (@somossbs) June 13, 2024
Guanajuato, centrado en la reinserción social
El secretario de Seguridad Pública del Estado de Guanajuato (México), Alvar Cabeza de Vaca Appendini, enfatizó la importancia de la reinserción social de los internos en los centros penitenciarios de ese lugar. Según Appendini, la función de estos centros no es juzgar y vengar, sino atender y rehabilitar a las personas.
Con 11 cárceles que albergan a 6 mil 381 personas sin problemas de sobrepoblación, Guanajuato ha invertido significativamente en infraestructura para evitar el hacinamiento y separar a los sentenciados de quienes aún están en procesos judiciales. Asimismo, se han implementado prisiones para adultos mayores y estancias infantiles, además de dormitorios preliberacionales para quienes están a un año de obtener su libertad.
El sistema penitenciario de Guanajuato también cuenta con dos clínicas fijas para la rehabilitación en casos de adicciones. Estos programas, de 100 días de duración y de ingreso voluntario, combinan tratamientos tradicionales con terapias alternativas como el temazcal.
La tecnología avanzada juega un papel importante en la seguridad de estos centros, con más de mil 300 cámaras de vigilancia y sistemas de inhibición de señal. Además, las aduanas inteligentes y la Unidad de Análisis e Inteligencia Penitenciaria, certificada por la Agencia Antidrogas de Estados Unidos, refuerzan la seguridad interna y externa.
Uno de los aspectos clave destacados por el secretario fue la dignificación del personal penitenciario. Los custodios en Guanajuato son los mejor pagados del país y tienen acceso a seguros de vida, gastos médicos mayores y los mejores hospitales. Este enfoque ha permitido reducir problemas de corrupción y mejorar la moral del personal. Además, se ha establecido una industria penitenciaria que facilita la reinserción laboral de los internos, permitiéndoles trabajar para empresas externas y generar ingresos para sus familias, lo que ha reducido la reincidencia delictiva a tan solo un 0.03 %, o sea 3 de cada 10 mil personas.
Guatemala, compromiso con la reforma penitenciaria
En Guatemala, el Gobierno ha mostrado un firme compromiso con la reforma del sistema carcelario. La construcción de nuevas prisiones y la implementación de tecnología avanzada son parte de sus esfuerzos por modernizar el sistema. La capacitación de los guardias penitenciarios y la cooperación internacional son fundamentales para asegurar el éxito de estas reformas.
La viceministra de Seguridad, Claudia Palencia, mencionó que recuperar el sistema penitenciario y combatir las pandillas son pasos importantes para mejorar la seguridad en el país. Operativos en prisiones como El Infiernito han demostrado el compromiso del Gobierno en este sentido.
La Secretaría de Bienestar Social de la Presidencia también tiene un papel en el tema, ha implementado el modelo Casa Intermedia para la reinserción de adolescentes en conflicto con la ley. Compuesta por tres residencias (Decisión, Esperanza y Oportunidad), Casa Intermedia proporciona un entorno riguroso y estructurado.
Los jóvenes reciben educación formal y capacitación técnica en áreas como computación y repostería, con el objetivo de facilitar su reinserción laboral. Este modelo no solo ofrece nuevas oportunidades, sino que también busca un cambio integral en la vida de los jóvenes.
Venezuela y el Proyecto Alcatraz
En Venezuela, Alberto Vollmer, fundador del Proyecto Alcatraz, ha adoptado un enfoque innovador para enfrentar la violencia. Tras un ataque armado en su hacienda, Vollmer decidió transformar la criminalidad a través del trabajo y el deporte, especialmente el rugby.
El proyecto ofrece a los delincuentes la opción de rehabilitarse a través de la disciplina deportiva. Este enfoque ha logrado resultados prometedores, con pandillas y cárceles solicitando su inclusión en el programa. Vollmer ha demostrado que, con respeto y disciplina, es posible transformar vidas y reducir la violencia, desafiando las convenciones tradicionales de seguridad y rehabilitación.
Innovación penitenciaria en Latinoamérica
El Congreso Regional Penitenciario destacó los desafíos y oportunidades en el camino hacia una reforma efectiva de los sistemas penitenciarios. Con enfoques innovadores y la cooperación internacional, hay esperanza de mejorar las condiciones en las prisiones y, en última instancia, la seguridad y justicia en estos países.
Experiencias como las de Guanajuato (México), Guatemala y el Proyecto Alcatraz en Venezuela ofrecen modelos inspiradores que pueden ser replicados en otros contextos para enfrentar la criminalidad y promover la reinserción social.
Lea también:
lr/dc/dm