Izabal, 21 mar (AGN).- Las acciones para impulsar el desarrollo forestal y garantizar la protección de los bosques naturales continúan en el país, con intervenciones que involucran a diversas comunidades.
En ese marco, en distintos puntos del territorio, incluido Izabal, se evalúan y certifican proyectos de incentivos forestales bajo la modalidad de manejo de bosques con fines de protección. Uno de estos planes se ejecuta en la comunidad Los Ángeles, en Livingston.
Durante una verificación reciente, se constató la elaboración de rondas cortafuegos, vigilancia contra la tala ilegal y sanidad de árboles. Una actividad similar se llevó a cabo en la aldea Sahila, en el mismo municipio.
Otro equipo efectuó un monitoreo de repoblación forestal en la comunidad Río Blanco, en Los Amates. Se evaluó el cumplimiento del compromiso adquirido por vecinos luego de adquirir la autorización para el aprovechamiento de la especie conocida como pino de Petén.
Estas inspecciones se realizan constantemente y están a cargo de delegaciones del Instituto Nacional de Bosques (Inab).
Trascendencia
De acuerdo con la entidad, los bosques naturales brindan diversos servicios ambientales a la población, por lo cual es imprescindible su protección y garantizar su aprovechamiento de manera sostenible.
Por ello, se trabaja en proyectos de manejo forestal en los cuales se incentiva la participación e involucramiento de los vecinos y autoridades locales. La implementación de estos planes incluye la capacitación y acompañamiento técnico.
Entre los temas en los cuales se asesora a los comunitarios destacan actividades silvícolas que contribuyen a la sanidad de los bosques y conservación de los ecosistemas. Las podas de formación y saneamiento son parte de las inducciones que se brindan.
Con las primeras, se busca que el árbol crezca libre de nudos, malformaciones y ramas excesivas, las cuales pueden reducir el rendimiento y valor comercial del ejemplar.
Entretanto, las podas de saneamiento consisten en eliminar el fuste o ramas infestadas y afectadas por plagas o enfermedades forestales. Con esta medida se pretende que un nuevo brote pueda sustituir al fuste dañado y el árbol pueda tener un adecuado desarrollo.
Legalidad forestal
Las medidas para proteger los bosques en Izabal también contemplan la supervisión de empresas que comercializan producto forestal. La intención es asegurar que desarrollan sus actividades en el marco de la legalidad.
De esa cuenta, personal del Inab visita comercios de ese tipo y evalúa tanto la documentación correspondiente como la madera que tienen en existencia, para corroborar su procedencia. Este mes, se han hecho recorridos en locales ubicados en Morales y Puerto Barrios, entre otros municipios.
Lea también:
kg