Ciudad de Guatemala, 15 abr (AGN).- El 7 de mayo de 2019, el FC Barcelona saltó a Anfield con la misión de sostener un 3-0 ante el Liverpool y alcanzar otra final de Champions League. Lo que siguió fue una de las noches más trágicas en la historia reciente del club catalán: un 4-0 que enterró sus ilusiones.
Desde entonces los fantasmas de Anfield Road no han dejado en paz a los de Can Barça, haciendo que hayan pasado seis años sin llegar a unas semifinales. En este lapso, no solo el club sufrió muchas modificaciones tanto en lo deportivo como en lo administrativo, sino que el mundo evolucionó de gran manera en tan poco tiempo.
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— FC Barcelona (@FCBarcelona_es) April 15, 2025
Cómo era el mundo en 2019
En cuanto a las redes sociales, TikTok existía, sí, pero era una app en crecimiento, no la plataforma global que hoy marca tendencias culturales. Twitter todavía tenía un pajarito azul, Elon Musk ni soñaba con comprarla y decirle “X”. Instagram mostraba fotos en orden cronológico y los reels aún no existían.
La palabra covid no significaba nada. La pandemia por el coronavirus no sonaba en el mundo, el uso de mascarillas era únicamente necesaria en los hospitales. Las reuniones por zoom y el teletrabajo era algo muy poco conocido.
OpenAI era un laboratorio en crecimiento, no una revolución mundial. La guerra en Ucrania no había empezado, Gaza aún no era el foco de una nueva escalada y el mundo creía que la geopolítica era un tema del pasado.
Un futbol distinto
En el Barcelona, el rey era Lionel Messi, quien cada fin de semana hacía vibrar los corazones de los aficionados culés. Suárez era su escolta en cada encuentro, haciendo que toda Europa temiera al enfrentarlos.
Andrés Iniesta ya se había ido a Japón, pero su sombra seguía fresca. Neymar ya vestía el PSG, pero el tridente MSN aún era un recuerdo reciente. El Camp Nou todavía no era un campo de obras y no se hablaba del “Spotify Camp Nou”.
Cristiano Ronaldo aún estaba en la Juventus. Zidane dirigía al Real Madrid. Erling Haaland era una promesa en el Salzburgo. Jude Bellingham tenía 15 años. La Superliga no había estallado ni colapsado. Ni siquiera existía el VAR en todas las ligas.
Kylian Mbappé aún no renovaba contrato mil veces con el PSG. Y Xavi Hernández miraba el futbol desde Qatar, aún lejos del banco culé. Griezmann, Coutinho y Dembelé no habían consumado su fracaso en el Barcelona.
Un Barcelona que resurgió de las cenizas
Luego de la última temporada en la que alcanzaron las semifinales en 2019, el Barcelona encadenó su peor seguidilla de fracasos europeos.
En dos ocasiones el PSG les mandó a casa antes de tiempo, el Bayern les envió a Europa League en dos temporadas consecutivas, prácticamente dejó de lado ser ese equipo dominante en Europa.
Sin embargo, en 2025 con Hansi Flick al mando el Barça volvió a unas semifinales. Sin Messi, sin Suárez, sin la MSN. Pero con una nueva generación liderada por Lamine Yamal, Gavi, Pedri y un entrenador que también fue leyenda.
En un mundo completamente distinto, el Barcelona regresa a una semifinal europea. Más joven, más austero, más herido, pero de nuevo entre los cuatro mejores.
El mundo cambió. El Barça también. Pero la Champions sigue siendo el lugar donde los grandes demuestran quiénes son. Y el Barcelona, seis años después, vuelve a decir: aquí estamos.
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Ja/rm/dm