Ciudad de Guatemala, 23 dic (AGN).– El campo de maniobras de la Escuela de Formación de Oficiales de Policía fue escenario, esta mañana, de un acto cargado de simbolismo y compromiso institucional: la clausura del vigesimoprimer curso de capacitación para el ascenso a oficial segundo y unidades especialistas de la Policía Nacional Civil (PNC). En total, 432 integrantes de las fuerzas policiales culminaron su proceso de especialización, mientras que 82 oficiales terceros ascendieron al grado de oficiales segundos, fortaleciendo la estructura jerárquica de la institución.
La ceremonia contó con la participación del ministro de Gobernación, Marco Antonio Villeda, así como de altos mandos policiales, entre ellos el director general de la PNC, David Custodio Boteo, quienes acompañaron a los graduandos y a sus familias en este momento trascendental.
Seguridad democrática y responsabilidad institucional
Durante su discurso, el ministro Villeda subrayó que este logro de los más de 500 miembros policiales representa el punto en el que el esfuerzo individual se transforma en una responsabilidad institucional. Recordó que la PNC, creada en 1997, nació como una institución civil y profesional al servicio de la ciudadanía, basada en el respeto a la ley, los derechos humanos y las libertades fundamentales.
El ministro, al enfatizar que la jerarquía no es un privilegio, sino orden, disciplina y compromiso, explicó:
El ascenso no es llegar, es asumir más peso y más impacto en las decisiones que afectan a otros.
Destacó que las especialidades obtenidas en el Comando de Operaciones Antinarcóticas, la División de Fuerzas Especiales, tecnología, victimología y aviación policial representan capacidades estratégicas que elevan el estándar profesional y la respuesta operativa del Estado.
Formación, mérito y vocación de servicio
Por su parte, el director general de la PNC resaltó que la culminación de este proceso formativo responde a una visión de Estado orientada a consolidar instituciones sólidas, confiables y cercanas a la ciudadanía. Señaló que los oficiales que hoy ascienden asumen una responsabilidad mayor, con la cual el liderazgo ético, la templanza y el apego a la legalidad serán determinantes.
Asimismo, reconoció el papel de las unidades especializadas, fundamentales para enfrentar escenarios de alto riesgo, combatir el crimen organizado, fortalecer la transformación digital institucional y garantizar una atención digna a las víctimas.
Ambas autoridades coincidieron en destacar el apoyo de las familias, quienes desde el silencio y la comprensión sostienen la vocación policial. Detrás de cada policía hay un hogar que espera, señaló el ministro, al recordar que miles de familias guatemaltecas apoyan diariamente el trabajo de la PNC.
El acto concluyó con un llamado a honrar el uniforme con integridad, humanidad y firmeza, reafirmando el compromiso de seguir construyendo una seguridad democrática, donde servir significa proteger con legalidad y poner a Guatemala primero.
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