Jalapa, 14 feb. (AGN).– Jalapa, conocida por su fervor religioso y arraigadas tradiciones, da inicio a la Cuaresma con una atmósfera de reflexión y renovación espiritual. Este período litúrgico, que precede a la Semana Santa, es observado con devoción por la comunidad católica, marcando un tiempo de preparación y penitencia.
Desde tempranas horas, los templos abren sus puertas para recibir a quienes desean participar en las ceremonias que marcan el inicio de esta importante época del calendario litúrgico.
En la Catedral, la misa de imposición de ceniza marca el inicio oficial de la Cuaresma. Los feligreses se reúnen en un ambiente de recogimiento, mientras el sacerdote, con gesto solemne, traza una cruz de ceniza en la frente de cada creyente, recordándoles su mortalidad y la necesidad de arrepentimiento.
Semana Santa
Durante los 40 días que abarca la Cuaresma, la comunidad de Jalapa se entrega a la oración, el ayuno y la caridad.
Las calles se llenan de iniciativas solidarias, desde colectas de alimentos para los más necesitados hasta campañas de concientización sobre la importancia de la reconciliación y el perdón.
Uno de los aspectos más destacados de la Cuaresma en Jalapa es la celebración de las tradicionales procesiones penitenciales. Fieles de todas las edades, vestidos con túnicas moradas y portando cruces y estandartes, recorren las principales arterias de la ciudad en un acto de profunda devoción y sacrificio.
Además de las prácticas religiosas, la Cuaresma en Jalapa también se vive como un tiempo de reflexión personal y comunitaria. Muchos habitantes aprovechan este período para realizar retiros espirituales, participar en encuentros de formación cristiana y fortalecer sus lazos familiares a través de la oración y la lectura de las escrituras sagradas.
Las procesiones
Para los gastrónomos, la Cuaresma también ofrece una oportunidad para explorar la rica tradición culinaria del departamento. Durante este tiempo, se puede degustar una variedad de platillos típicos preparados especialmente para la temporada. Se cuenta desde deliciosos guisos de pescado hasta exquisitas empanadas de vigilia.
A medida que avanza la Cuaresma, la comunidad de Jalapa se prepara para vivir con intensidad los días santos de la Semana Mayor. Las procesiones, los actos litúrgicos y las celebraciones populares se multiplican, recordando a los fieles el sacrificio redentor de Cristo y la esperanza de la resurrección.
En medio de la vorágine de actividades y celebraciones, la Cuaresma en Jalapa invita a detenerse, reflexionar y renovar el compromiso con los valores del Evangelio. Es un tiempo de gracia y conversión, que invita a todos los creyentes a profundizar en su relación con Dios y con sus semejantes, en un espíritu de amor, perdón y solidaridad.
Así, en Jalapa, el inicio de la Cuaresma no es solo una fecha en el calendario litúrgico. Sino un llamado a la conversión y la renovación espiritual que resuena en el corazón de cada habitante de esta fervorosa comunidad religiosa.
Por Abner Salguero
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