Redacción Ciencia, 17 oct (EFE).- El impacto en la salud de las personas de una catástrofe natural a gran escala, como el gran maremoto y posterior tsunami ocurridos en la costa de Indonesia en 2004, permanece más de 10 años tras la exposición al mismo, según ha constatado un estudio publicado hoy en la revista Proceedings of the National Academy of Science.
Sus conclusiones se basan en el seguimiento de la salud de un grupo de mujeres de la costa de Banda Aceh. En el lugar se produjeron algunas de las mayores olas y consecuencias del citado tsunami hace 14 años.
En el estudio, compararon resultados con un grupo similar de población de comunidades costeras cercanas que no se vieron directamente afectadas por este fenómeno.
La catástrofe ocurrida en el océano Índico en 2004 es conocida también como el terremoto de Sumatra-Andamán. Devastó grandes áreas costeras de Indonesia, Sri Lanka, India, Tailandia y otros países con olas que llegaron a los 30 metros y acabaron con la vida de más de 170 mil personas.
26 diciembre 2004 Un terremoto 9.3 de magnitud, provoca un tsunami que afecta Sri Lanka, India, Indonesia, Tailandia, Malasia, las Maldivas y orillas del Océano Índico, fallecen 230,000 personas. pic.twitter.com/LFGV5kMBKC
— Daniel Rucks (@RucksDelBo) December 26, 2020
Irregularidad hormonal
Los investigadores han visto cómo, 14 años después, las mujeres supervivientes del tsunami en Banda Aceh presentaban niveles bajos de cortisol, una hormona producida por las glándulas suprarrenales cuya producción se incrementa en situaciones de estrés como mecanismo de defensa del cuerpo.
Los bajos niveles de cortisol que tienen estas mujeres están relacionados, según el estudio, con un agotamiento del eje hipotálamo-hipofisario-suprarrenal (HHS), compuesto por tres órganos (hipotálamo, hipófisis y órganos suprarrenales) cuyas interacciones componen un sistema neuroendocrino vital que regula la reacción al estrés, entre otros muchos procesos como el sistema inmunológico o la digestión.
Elizabeth Frankenberg, junto a Duncan Thomas y Cecep Sumantri, dirige el proyecto científico Estudio de las secuelas y la recuperación del tsunami a largo plazo (STAR, por sus siglas en inglés).
En cuanto al hallazgo, la investigadora señaló:
Transcurridos 14 años, las secuelas son mayores en mujeres que declararon niveles elevados de estrés postraumático los dos años posteriores al tsunami.
Frankenberg y sus compañeros han hecho seguimiento de un grupo de supervivientes del tsunami de Indonesia desde que este se produjo, recogiendo todo tipo de muestras (de pelo, por ejemplo).
VIDEO | Indonesia reza por las víctimas del tsunami de 2004, que dejó 230.000 muertos. pic.twitter.com/au9TJHlisN
— EFE Noticias (@EFEnoticias) December 26, 2022
Impacto en la salud
Entre otras cuestiones, la investigadora añadió en un comunicado de la Universidad de Carolina del Norte:
Las personas con niveles bajos de cortisol tienen peor salud física y psicosocial 14 años después del tsunami, prueba del largo alcance de este desastre natural en la salud de los afectados.
Los destrozos causados por el tsunami de Indonesia de 2004 son muy similares en alcance, señalan los autores, a los de otros desastres naturales como huracanes o grandes inundaciones.
Para concluir, Frankenberg indicó:
Las lecciones que deja el seguimiento de la población de Banda Aceh durante casi 20 años son importantes como advertencia de las consecuencias de los impactos del cambio climático en poblaciones de todo el mundo en el largo plazo.
STAR es un proyecto colaborativo de estudio de las consecuencias de esta catástrofe para la salud en el que participan investigadores de la Universidad de Carolina del Norte, la Universidad de Duke, SurveyMETER (Indonesia), la Universidad de Harvard, la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) y la Universidad del Sur de California. EFE
Puede interesarle:
La voz humana asusta más a los animales que el sonido del león
dc