Ciudad de Guatemala, 3 may (AGN).- El presidente Bernardo Arévalo afirmó este jueves que el Gobierno respetará y fomentará la libertad de expresión y de prensa por considerar que son elementos fundamentales de una democracia como la que se aspira a consolidar en Guatemala.
Además, reiteró su convicción de que no puede hablarse de democracia si no hay libertad de expresión, y sin libertad de prensa no se puede hablar de libertad de expresión.
En otras palabras, un gobierno es democrático en la medida en que el compromiso con la libertad de expresión, el acceso a la información y la rendición de cuentas sean una realidad, y que además apoya y protege la labor de la prensa, enfatizó.
El presidente Arévalo encabezó una ceremonia especial en el Patio de la Paz del Palacio Nacional de la Cultura, con motivo de la conmemoración del Día Mundial de la Libertad de Prensa que se celebra cada 3 de mayo.
En esta oportunidad, el Gobierno reconoció la trayectoria de Ana Julieta Cárdenas, presidenta de la Asociación de Periodistas de Guatemala (APG), de Norma Sancir, destacada en el periodismo comunitario, y de la institución emblemática del gremio guatemalteco por el 77 aniversario de su fundación.
El periodista retirado, Mario René Chávez, quien evocó las épocas de la recién fundada APG, que coincidió con el gobierno del presidente Juan José Arévalo Bermejo (1945-1951), recibió el reconocimiento en nombre de la institución que agrupa a los periodistas nacionales y que presidió en varias ocasiones.
El Gobierno de Guatemala reconoce a las y los periodistas que han defendido, incluso desde el exilio, la libertad de prensa. Su compromiso con la libertad de expresión, el acceso a la información y la rendición de cuentas es indispensable para un gobierno democrático. 📰📲
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— Gobierno Guatemala (@GuatemalaGob) May 3, 2024
Democracia y protección de libertad de prensa y de expresión
En su mensaje a los periodistas reunidos en el Patio de la Paz, el presidente Arévalo expuso que las libertades de prensa y de expresión no deberían ejercerse como una obligación.
Una obligación es algo que se impone sobre la voluntad, (mientras que) un gobierno democrático debe tener la vocación y entender que la protección de la libertad de expresión, la protección de la libertad de prensa, no son cuestión de obligación sino de responsabilidad.
En consecuencia, dicha responsabilidad se tiene que apoyar en la convicción de que sin estos elementos no tendremos democracia.
“La prensa no se vigila, no se amenaza y no se persigue”
Recalcó que para que una sociedad avance las libertades básicas de toda persona deben estar consolidadas y garantizadas por los gobiernos. No únicamente en términos de que estén inscritas en las leyes correspondientes, sino en la medida en que las autoridades asumen la responsabilidad para cumplir y hacer cumplir esas leyes.
Advirtió, sin embargo, que de nada sirven leyes garantistas cuando las mismas autoridades políticas no se comportan a la altura de las leyes y permiten que haya una brecha entre lo que se establece legalmente y lo que se cumple en la práctica.
En este sentido, dijo que la Declaración Universal de Derechos Humanos, que es una guía para nuestro trabajo diario, declara que toda persona tiene el derecho de investigar y recibir informaciones y opiniones, así como de difundirlas, pero también para protegerlas.
Al referirse al motivo establecido este año por la Unesco (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) para conmemorar el Día Mundial de la Libertad de Prensa, que la vinculó al contexto actual de la crisis medioambiental en el mundo, dijo que ambos conceptos se dan en Guatemala.
Al respecto, el presidente Arévalo aseguró:
Esta vinculación se entiende perfectamente en países como en Guatemala, en donde la libertad de expresión, la libertad de prensa, con los derechos ambientales, han sido constantemente vulnerados por quienes se atrincheran en la oscuridad de la corrupción.
Instancia analizará ataques a defensores de derechos
Acerca de esto, indicó que hoy, en particular, debemos reconocer la situación que durante los últimos años orilló a muchos periodistas a salir al exilio al ser intimidados, amenazados, perseguidos, hasta privados de su libertad por ejercer este derecho básico.
Como Gobierno, a través de la Comisión Presidencial por la Paz y Derechos Humanos, hemos puesto en marcha los mecanismos necesarios para consolidar los derechos fundamentales de los periodistas, así como, reconocer que existen personas que deben ser atendidas como defensoras de derechos, como Cárdenas y Sancir.
Lo digo con toda convicción: la prensa no se vigila, no se amenaza y no se persigue, enfatizó el presidente Arévalo, quien anunció que esta semana se puso en marcha la instancia de análisis de ataques a defensores de derechos:
La instancia incluye espacios y mecanismos específicos para trabajar con periodistas alrededor de la identificación de los retos y posibles intimidaciones que enfrentan y de los mecanismos para poder protegerlos.
Esta iniciativa quedará institucionalizada en las Políticas de Protección a Defensores de Derechos que se elabora con participación de autoridades y periodistas y defensores de los derechos humanos, destacó.
Por Pablo Palomo
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