Ciudad de Guatemala, 21 oct (AGN).– En la Ciudad de Santiago de los Caballeros, Antigua Guatemala, se desarrolla la Quinta Reunión de Autoridades Responsables de Políticas Penitenciarias y Carcelarias de los Estados miembros de la Organización de Estados Americanos (OEA).
El evento, que se celebra el 21 y 22 de octubre de 2025, reúne a líderes regionales con el propósito de fortalecer los sistemas penitenciarios desde un enfoque humano, seguro y orientado a la reinserción social.
Durante el acto inaugural participaron el presidente Bernardo Arévalo;, el secretario general adjunto de la OEA, Albert Ramdin; el secretario de Seguridad Multidimensional, Iván Márquez, y el director interino del Sistema Penitenciario de Guatemala, Mario Pacay, entre otras autoridades nacionales e internacionales.
Quinta Reunión de Autoridades Responsables de Políticas Penitenciarias y Carcelarias de los miembros de OEA. https://t.co/FMO6clXngU
— Gobierno de Guatemala 🇬🇹 (@GuatemalaGob) October 21, 2025
Espacio para el diálogo y la cooperación
El encuentro fue descrito como un espacio de diálogo hemisférico en el que los países miembros comparten experiencias, reflexionan sobre desafíos comunes y buscan avanzar hacia sistemas penitenciarios más humanos y efectivos.
El presidente Arévalo destacó la relevancia de generar consensos que promuevan la modernización institucional, el respeto a la dignidad humana y la reinserción de las personas privadas de libertad, pilares fundamentales para una justicia restaurativa en la región.
Este foro se lleva a cabo bajo los mandatos emanados de la cuarta reunión de autoridades penitenciarias de 2020, que recomendó continuar con los esfuerzos de cooperación técnica y de la resolución sobre la promoción de la seguridad hemisférica aprobada por la Asamblea General de la OEA en junio de 2024, la cual designó a Guatemala como país anfitrión.
La visión de la OEA: hacia una justicia restauradora
En su intervención, Ramdin expresó su reconocimiento al Gobierno de Guatemala por su hospitalidad y compromiso en la promoción de políticas públicas centradas en los derechos humanos y la resocialización.
Acerca de los objetivos de la reunión, el secretario general adjunto de la OEA expuso:
Esta reunión refleja la determinación del país de fortalecer la cooperación hemisférica en favor de sistemas penitenciarios más efectivos, centrados en la rehabilitación.
Además, el representante de la OEA resaltó que los sistemas penitenciarios deben transitar de un enfoque meramente punitivo a uno transformador, que prepare a los individuos para la vida después de su liberación.
También subrayó los avances alcanzados en varios países mediante reformas jurídicas, programas de reintegración y uso de la tecnología como herramientas de transparencia.
Desafíos comunes y compromiso compartido
Ramdin reconoció que el hacinamiento, la falta de recursos y la infiltración del crimen organizado siguen siendo grandes retos para los sistemas penitenciarios del continente.
En este sentido, enfatizó sobre la necesidad de promover la cooperación regional y global, ya que ningún país puede enfrentar solo la delincuencia transnacional.
Asimismo, hizo un llamado especial a atender a los jóvenes privados de libertad, quienes con frecuencia son víctimas de la pobreza, la violencia y la exclusión:
Nuestra responsabilidad colectiva es asegurar que los jóvenes de las Américas puedan convertirse en miembros productivos y dignos de nuestras sociedades.
Finalmente, el secretario Ramdin instó a los Estados a construir una hoja de ruta con compromisos efectivos y mecanismos de seguimiento que garanticen avances reales hacia sistemas penitenciarios más humanos.
Los delitos no se resuelven creando más prisiones, sino transformando las condiciones estructurales que los originan, dijo el representante de la OEA.
Además, reafirmó el compromiso de la OEA de continuar apoyando a los países miembros en sus esfuerzos por la rehabilitación, la justicia restauradora y la dignidad humana.
Con este encuentro, Guatemala reafirma su liderazgo regional en la búsqueda de soluciones integrales para los sistemas penitenciarios de las Américas, consolidando su papel como un país comprometido con la cooperación, la seguridad y los derechos humanos.
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