Redacción Ciencia, 1 oct (EFE).- El primer intento de la humanidad para aprender a desviar un asteroide con la misión DART (Prueba de Redireccionamiento de un Asteroide Binario, por sus siglas en inglés) fue seguido por dos de los telescopios espaciales más famosos: el veterano Hubble y el flamante James Webb. Una colisión de la que cada uno ha dado su propia visión.
Esta es también la primera vez que ambos telescopios observan a la vez un mismo objetivo celeste. Este era el asteroide Dimorphos, contra el que el pasado lunes se lanzó a una velocidad de 6.6 kilómetros por segundo la sonda DART para modificar ligeramente su órbita alrededor de un asteroide mayor, Didymos.
Estas observaciones no solo son un hito operativo para cada telescopio, sino que también hay cuestiones científicas clave relacionadas con la composición y la historia del sistema solar que los investigadores pueden explorar al combinar las capacidades de los dos telescopios.
Los telescopios @nasawebb y @NASAHubble captaron los efectos de la misión #DART al colisionar con un asteroide en una prueba de defensa planetaria. Es la primera vez que ambos telescopios observan el mismo objetivo al mismo tiempo: https://t.co/qGTQUrcHjj pic.twitter.com/7u16nknk05
— NASA en español (@NASA_es) September 29, 2022
Objetivo de la misión
Las observaciones conjuntas de Webb y Hubble permitirán conocer la naturaleza de la superficie de Dimorphos, la cantidad de material expulsado por la colisión y la rapidez, explicó la Agencia Espacial Europea (ESA) en un comunicado.
Además, la observación del impacto revelará la distribución del tamaño de las partículas en la nube de polvo en expansión. Con esto, se ayudará a determinar si arrojó muchos trozos grandes o principalmente polvo fino.
Todo ello permitirá comprender hasta qué punto el impacto cinético de DART puede modificar la órbita de un asteroide, en el caso de que un día sea necesario para proteger a la Tierra.
Detalles de telescopios
Webb observó el lugar del impacto antes y después durante cinco horas. Su cámara de infrarrojo cercano (NIRCam) muestra un núcleo compacto y apretado, con penachos de material que aparecen como volutas que se alejan del centro donde se produjo el impacto.
Los científicos tienen previsto seguir observando el asteroide en los próximos meses con los diversos instrumentos de Webb, que darán datos sobre su composición química.
Hubble también hizo observaciones antes del impacto y 15 minutos después, para tomar imágenes del choque en luz visible.
La eyección de material causada por DART en el superficie de Dimorphos se ve a ojos de Hubble como rayos que se extienden desde el cuerpo del asteroide.
Con las imágenes de Hubble, los astrónomos estiman que el brillo de Didymos se multiplicó por tres después del choque.
Los científicos están especialmente intrigados en saber por qué ese brillo se mantuvo luego estable, incluso ocho horas después del impacto.
Hubble observará Dimorphos 10 veces más durante las próximas tres semanas, lo que le permitirá, a medida que la nube de eyección se expanda y desvanezca, obtener una imagen más completa de la expansión de la nube desde la eyección hasta su desaparición.
Lea también:
El intento de desviar un asteroide, que se seguirá en vivo, hará historia
lc/dm