Ciudad de Guatemala, 8 jun (AGN).- Setenta y seis días duraron las ilusiones, anhelos, sueños y esperanzas de millones de aficionados guatemaltecos de ver por primera vez a la selección nacional en su primera Copa del Mundo de la FIFA.
La Bicolor empató esta noche ante Curazao 0-0 y perdió toda la posibilidad de continuar en el camino eliminatorio rumbo a Catar 2022. El duelo estuvo marcado por la fuerza por parte de ambas selecciones, y un juego que careció de técnica.
Guatemala no controló el esférico, no lo hizo su mejor compañero, y ante ello, no generó el futbol ni mucho menos los goles que hizo en el anterior partido.
Un retroceso de 27 años
Con este intento fallido, Guatemala suma 16 fracasos eliminatorios: Suecia 1958, Chile 1962, México 1970, Alemania 1974, Argentina 1978, España 1982, México 1986, Italia 1990, Estados Unidos 1994, Francia 1998, Corea-Japón 2002, Alemania 2006, Sudáfrica 2010, Brasil 2014, Rusia 2018 y Catar 2022.
Guatemala fue incapaz de superar la primera ronda de esta eliminatoria, así como le ocurrió en 6 oportunidades: Suecia 1958, Chile 1962, México 1970, España 1982 (preliminar), México 1986 y Estados Unidos 1994.
Además, el trabajo de Amarini Villatoro tuvo un retroceso de 27 años relacionado con el avance que había tenido la Azul y Blanco en eliminatorias anteriores, en las que jugó segunda, tercera y cuarta rondas, así como la hexagonal rumbo a Alemania 2006.
Otro de los datos importantes es que Guatemala jugó solo 4 partidos en este camino a Catar 2022, así como ocurrió en los caminos a México en 1970 y 1986.
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Falta un goleador
Esta fue la primera eliminatoria mundialista que se jugó sin la presencia del máximo goleador de la selección guatemalteca, Carlos Ruiz. Y el poco tiempo de un proceso a otro no hubo ningún jugador que lo sustituyera.
Guatemala goleó a los rivales que debía golear, aunque no lo hizo con la cantidad que la hubiese puesto en mejores condiciones para enfrentar a Curazao.
- Ante Cuba se ganó 1-0 en casa con gol de Luis Martínez.
- A Islas Vírgenes Británicas, una de las peores selecciones del mundo, se le goleó en casa, pero solo 0-3, con anotaciones de Darwin Lom, Moisés Hernández y Robin Betancourth.
- Luego, vino la goleada que ilusionó: 10-0 ante San Vicente y las Granadinas, pero sin tener un referente del gol. Si bien es cierto, se hizo un récord histórico porque por primera vez anotaron en un partido 10 jugadores distintos, no hubo ni se encontró a ese delantero que firmara una noche mágica, así como lo había hecho Carlos Ruiz, ante esa misma selección en 2016, cuando concretó 5 dianas.
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Bajas por lesión
Amarini Villatoro hizo una preparación, en la cual jamás se contó que tres de sus principales piezas quedarían al margen de los partidos más vitales para el combinado guatemalteco.
Primero fue el nacionalizado guatemalteco Nicholas Rittmeyer, quien tuvo una ruptura del tendón de Aquiles durante un entrenamiento con su equipo, Charleston Baterry, y quedó al margen de los partidos ante San Vicente y las Granadinas, y Curazao.
Pocos días después, también el otro nacionalizado, Jesús López fue víctima de una artera falta y terminó con una fractura en la tibia y el peroné. También quedó al margen de ambos juegos.
Por último, Gerardo Gordillo, el defensa central de confianza de Amarini, salió lesionado tras la victoria ante los sanvicentinos y fue baja para el duelo crucial y transcendente ante los curazoleños.
Futbol guatemalteco conmocionado por la lesión de Jesús “Chucho” López
Los indisciplinados
Todos los seleccionados buscaban cumplir sueños y metas. Se mentalizaban entreno a entreno en ser los mejores y ser parte del 11 inicial de su estratega. Pero tres de ellos se inclinaron por la indisciplina que los llevó a ser retirados de la Bicolor.
Se trató de los jugadores de Comunicaciones Carlos Mejía, Jorge Aparicio y Alejandro Galindo, quienes abandonaron plena concentración para acudir a una fiesta en tiempo de pandemia del coronavirus y fueron vetados y sancionados por sus actos indisciplinados.
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Procesos pendientes de nacionalización
Guatemala preparaba su camino con intenciones de avanzar, y una de sus estrategias fue la búsqueda de talentos para posteriormente nacionalizarlos. En ese proceso se encuentra Kobe Pérez, quien fue invitado a un microciclo de trabajo al igual que Rubio Rubín.
En ese tema de los nacionalizados también se habla mucho del goleador mexicano Carlos Kamiani, del Deportivo Iztapa, pero oficialmente no hay nada concreto de que se pueda unir a la Bicolor.
Ante esa eliminación, y con solo la opción de poder clasificar a la Copa Oro 2021, se deberá esperar la decisión de los futbolistas o la misma evolución de dichos procesos.
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