Ciudad de Guatemala, 19 sep (AGN).- El presidente Bernardo Arévalo y la vicepresidenta Karin Herrera participaron este miércoles 18 de agosto en el concierto de la cantante guatemalteca Sara Curruchich.
La actividad se desarrolló en el Centro Cultural de España, en el corazón del Centro Histórico de la Ciudad de Guatemala.
Sara es considerada una gran artista nacional y exponente de una música inspiradora y llena de aliento. Su talento se ha desarrollado con el paso de los años, y refleja la cultura artística enraizada en su familia.
Antes del concierto, los mandatarios tuvieron la oportunidad de conversar con la intérprete guatemalteca.
La vicepresidenta Herrera expresó en su redes sociales que tiene la certeza de que a través del arte se puede inspirar esperanza y construir un camino donde el presente y el pasado se entrelazan.
Dicha convergencia sería vital para transitar hacia un mejor futuro.
Hoy tuve el honor de saludar a Sara Curruchich previo a su concierto. 🤩🎤
Tengo la certeza de que, a través del arte, podemos inspirar esperanza y construir un camino donde el presente y el pasado se entrelazan para transitar hacia un mejor futuro. ✨ pic.twitter.com/NMbjNxjnsL
— Karin Herrera (@KarinHerreraVP) September 19, 2024
Datos biográficos
Sara Curruchich Cúmez, conocida como Sara Curruchich (San Juan Comalapa, 25 de julio de 1993) es una cantante y compositora guatemalteca de origen maya cakchiquel.
Asimismo, es activista en defensa de los derechos de las mujeres y de los pueblos originarios de Guatemala. Además de ser compositora, toca la marimba y la guitarra y es colaboradora de ONU Mujeres en Guatemala.
Con esta instancia internacional ha tenido la oportunidad de abogar por los derechos femeninos en el país.
Aprendió música escuchando a su padre, quien era músico empírico y tocaba la guitarra, mientras que su madre cantaba. Desde que tiene memoria, Sara recuerda querer dedicarse a la música.
Sara Curruchich en concierto. / Foto: Byron de la Cruz
Estudió en la Escuela Normal para Maestros de Música Jesús María Alvarado, y comenzó su carrera artística en 2012.
Sus canciones hablan sobre el respeto por la naturaleza y la memoria de los pueblos mayas y en ellas mezcla el español con el cakchiquel, como una manera de reivindicar su idioma materno.
Con la balada Ch’uti’xtän (Niña) se hizo especialmente conocida en Guatemala y logró más de 2 millones de visitas en las redes sociales.
Sus canciones, inspiradoras y llenas de aliento, forman parte de una nueva generación de artistas inspirados en la naturaleza y la convergencia social.
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