Ciudad de Guatemala, 07 oct (AGN). – En la aldea Barra El Jiote, Moyuta, Jutiapa, el Consejo Nacional de Áreas Protegidas (Conap), junto a organizaciones no gubernamentales, comunidades y centros educativos, se unen para la conservación de las tortugas marinas, que llegan a las playas como áreas de migración, zonas para alimentarse, descansar y anidar
Tortugario Manuelita
En esta playa, funciona el Tortugario Manuelita, uno de los más de 30 tortugarios registrados en el Conap que reportan los datos obtenidos en relación con el manejo de cada temporada de reproducción.
Este se ha se ha consolidado como un ejemplo de compromiso y trabajo comunitario en favor de la conservación de las tortugas marinas en la costa sur de Guatemala. A lo largo de los años, este espacio ha contribuido a la protección de la especie y al fortalecimiento de las comunidades locales mediante diversas iniciativas sociales y ambientales.
El proyecto, impulsado por doña Angie Begemann y don Pedro Yanes guarda ha contado con el apoyo de organizaciones como Chapinisimo y Secology, así como con la colaboración del Conap.
Además, gracias a estas alianzas, se ha logrado coadyuvar al bienestar de las familias a través de la recepción de huevos, entrega de víveres y gallinas ponedoras, así como el fomento de la educación ambiental en la zona.
De acuerdo con los impulsores del proyecto, el tortugario funcionó décadas atrás, sin embargo, permaneció inactivo durante varios años y en la temporada 2015-2016 instalaron un pequeño espacio y empezaron a conservar huevos en tres nidos.
Con el paso del tiempo, el esfuerzo y la dedicación dieron resultados notables. Actualmente, el Tortugario Manuelita ha logrado sembrar más de 30 mil huevos de tortuga marina, consolidándose como un referente en la protección de estas especies en peligro.
Limpieza de playa
Con el propósito de proteger los espacios en los que las tortugas marinas llegan a desovar, personal del Conap, voluntarios, representantes de los tortugarios locales, el Ejército de Guatemala y escuelas de la localidad realizaron una jornada de limpieza de la playa el Jiote.
Marlon Chilín, técnico marino de la Dirección Regional Suroriente de Conap, explicó que estas acciones buscan mantener las playas libres de contaminación, especialmente de plásticos y desechos sólidos que ponen en riesgo los ecosistemas costeros.
Pedro Yanes, guardarecursos del Conap y encargado del Tortugario Manuelita, expresó su satisfacción por formar parte de la actividad y expresó su satisfacción de ser parte de esta tarea, ya que es importante que las playas se mantengan limpias para que las tortugas puedan llegar a desovar. También hizo un llamado a los visitantes para adoptar prácticas responsables durante su visita a las playas.
Así lo manifestó Yanes:
Pedimos a quienes vienen a las playas que se lleven su basura, es parte de nuestro equipaje. Si no lo hacemos, perjudicamos al planeta. Y a quienes hacen fogatas, que las apaguen correctamente, porque una tortuga podría llegar a ese punto y quemarse.
Recolección de huevos
Al caer la noche, la comunidad acompañada por personal de Conap y el Ejército de Guatemala, emprende su camino a las orillas de la playa para buscar nidos de tortugas o desovando.
Marlon Chilín, compartió que al momento de ver a una tortuga saliendo del mar, hay que dejar que siga su camino y que empiece a hacer su nido, sin ninguna intervención. Así, cuando empiece a desovar, cava un agujero cerca de donde esta se encuentra para poder colocar los huevos.
Tanto el sacar los huevos como fotografiar deberá hacerse con precaución y sin colocar luz directa a la tortuga, ya que puede llegar a estresarse.
Luego de sacar los huevos y cerciorarse que la tortuga haya terminado de desovar, se deberá tapar el agujero hecho, ella por su parte empezará a tapar el que hizo, tratando de no dejar rastro. Ya que finalizó, regresará al mar nuevamente.
Conap compartió que la recolección de huevos para la conservación en un tortugario ayuda a protegerlos de cualquier depredador, del uso indebido o de las altas temperaturas que pueden afectar al huevo y no dejar que llegue a eclosionar.
Liberación de neonatos
De los nidos de tortugas que el tortugario Manuelita desarrolla, la noche del martes 30 de septiembre nacieron en una noche 74 pequeñas tortugas parlama, los cuales llevaron un proceso de eclosión de 45 a 50 días.
Al momento de su liberación, se llevan en un balde de agua y se liberan en la playa a 10 metros de donde llegan las olas para que en su piel se lleve a cabo un proceso de improntación que permite que las tortugas marinas regresen años después a la misma playa donde nacieron para desovar.
ca