Santa María Nebaj, Quiché, 2 feb (AGN).- “Me animaron a seguir estudiando. Gracias a Dios por esta oportunidad y a las autoridades que nos están apoyando”, dijo Catarina Micaela Gómez, una de las beneficiarias del programa Alianza por la Educación.
La joven, de 19 años, contó que cada día adquiere nuevos conocimientos gracias al apoyo que se le brinda por medio de la citada iniciativa.
Reside en la aldea El Paraíso, ubicada a 15 minutos de Santa María Nebaj, en Quiché, y el desarrollo de nuevas competencias ha despertado en ella el anhelo de contar con un negocio propio.
La #MinistraClaudiaRuíz visitó la casa de la joven Catarina Micaela en aldea El Paraíso, Nebaj, Quiché, quien es una de las estudiantes beneficiadas de los programas de capacitación en línea desde su hogar a través del Proyecto #AlianzaPorLaEducación. pic.twitter.com/WrGA6S5w9n
— Mineduc Guatemala (@MineducGT) February 2, 2021
La vida de Catarina
Desde muy temprano, Catarina se dispone a realizar las labores del hogar para apoyar a sus seres queridos.
Limpiar las habitaciones, tender las camas, lavar los trastos y ayudar en la cocina o en el jardín son algunas de las tareas que realiza diariamente. Además, brinda alimentos y cuida a las mascotas de la familia.
Tras finalizar con los quehaceres, se prepara para recibir un curso a distancia, con el fin de mejorar sus aptitudes y contar con más oportunidades de desarrollo.
“Esto me servirá para encontrar un trabajo y tener mejores condiciones de vida”, expresó en entrevista para la Agencia Guatemalteca de Noticias.
Asimismo, compartió que su mayor anhelo es tener su propia empresa de lácteos para ayudar a su familia y a su comunidad.
La joven se dijo consciente de que solo mediante la adquisición de nuevos conocimientos y competencias podrá concretar lo que hasta ahora es un sueño.
Por eso, manifestó su compromiso de aprovechar al máximo el apoyo que le brindan varias entidades, por medio de la Alianza por la Educación.
Este proyecto, que busca ofrecer oportunidades de progreso a muchachos residentes y originarios de áreas vulnerables, también tiene como propósito ayudar a quienes volvieron a su comunidad tras ser retornados de Estados Unidos.
Entidades gubernamentales, privadas y de cooperación internacional se unieron en esta tarea, lo cual permite a los favorecidos recibir instrucción a distancia.
Para el efecto, se les dotó de la tecnología necesaria, como computadoras e internet.
“En un inicio todo era más difícil, ya que no tenía computadora, pero ahora agradezco a las autoridades porque no solo me dieron una, sino también me instalaron internet”, comentó la joven.
Historias y sueños que se entrelazan
Al igual que la entrevistada, su prima Catarina Heidi Gómez, de 15 años, se beneficia del programa.
Recientemente su padre partió a Estados Unidos; sin embargo, la adolescente busca un futuro diferente y con ayuda de la Alianza por la Educación espera contar con los medios para progresar.
Ante la ausencia de la figura paterna, Heidi se ha convertido en un pilar fundamental para su familia y en el respaldo de su madre.
Según expresó, quiere ser un ejemplo para las más pequeñas del hogar.
“Tengo tres hermanitas y quiero ser una profesional, para enseñarles a ellas la importancia de seguir los estudios”, dijo.
Además, aseguró que le ilusiona poder convertirse en una empresaria y brindar oportunidades de empleo a otras personas de su comunidad.
Por su parte, María Ester Corio, madre de Heidi y tía de Micaela, externó su satisfacción y orgullo al apreciar que las jovencitas busquen salir adelante.
Aunque existen pocas oportunidades laborales en la aldea, la familia dedica la mayor parte de su tiempo al cultivo de papa y tomate, así como a la preparación de postres. Estos se comercializan en la misma comunidad.
Con esmero y dedicación, las tres entrevistadas y el resto de su núcleo riegan cada día el campo que les provee de alimentos y limpian la cosecha para evitar las plagas. Esto es parte del día a día en esta aldea.
“Me siento muy orgullosa y feliz porque ellas están alcanzando sus metas. Mi hija tiene a sus hermanitas y estoy segura de que será un ejemplo para ellas”, manifestó.
Estabilidad en la comunidad
La historia de las jóvenes es similar a la de otros residentes del altiplano occidental, quienes buscan posibilidades de superación dentro de su comunidad.
La idea de las adolescentes es seguir adquiriendo conocimientos y así tener un futuro prometedor, para no tener que migrar a Estados Unidos.
De acuerdo con la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), entre enero y julio de 2020, 26 mil 243 guatemaltecos regresaron a Guatemala después de haber migrado. El 52,1 por ciento retornó de Estados Unidos y el 47,9 por ciento fue deportado desde México.
Esta institución ha determinado que la población que retornó a Quiché en 2019 tenía en promedio cuatro años de experiencia laboral tras haber vivido en EE. UU.
Efectuar este análisis ha servido para vincular de mejor manera las competencias de los connacionales deportados con las posibilidades de formación, certificación y empleo.
Así se estableció que las áreas de mayor demanda son la agricultura, construcción y turismo.
De esta cuenta, la implementación de la Alianza por la Educación se inicia dentro de un área geográfica seleccionada en Nebaj, donde se brindarán los siguientes servicios de reintegración:
- análisis de mercados laborales locales para determinar potencial de empleabilidad y áreas prioritarias para la instrucción
- jornadas de evaluación por competencias para los retornados
- capacitación híbrida, basada en la demanda del mercado local
Las autoridades pretenden que el programa sea replicado en otros municipios remotos del país para seguir coadyuvando al progreso de su población.
La tecnología juega un papel fundamental en este plan, pues facilita la educación y capacitación a grandes grupos de personas de forma simultánea.
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AGN jm/kg/dm