Guatemala, 18 feb (AGN).- Los llamados huertos o altares cuaresmales forman parte del rico patrimonio de religiosidad popular en Guatemala.
En sus inicios, la evangelización en América necesitó de medios para que la población asimilara el catolicismo.
Así surgieron muchas manifestaciones de piedad popular, entre estas, los huertos y altares de velación.
Estos regularmente se elaboran durante la Cuaresma, y forman parte de la llamada evangelización popular.
La procesión de Jesús Nazareno de la Iglesia de Santiago Apóstol recorrió las calles de Santiago Atitlán, Sololá, este primer viernes de cuaresma de la #SemanaSantaGTPatrimonioHumanidad, una muestra de nuestro Patrimonio vivo que es transmitido de generación en generación. pic.twitter.com/i78k5Edplu
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Estimulan los sentidos
El manejo del espacio, los elementos decorativos, la profundidad y la iluminación del altar crean efectos teatrales para la recreación de las escenas, en las que la imagen de veneración es el centro de atención.
Los altares de velación cuaresmal también incorporan los huertos. Estos regularmente forman parte de una alfombra de aserrín de colores.
Al respecto, en los huertos se utiliza gran variedad de frutas y verduras. Su objetivo es servir de ofrenda.
Estos tienen su origen en manifestaciones de religiosidad prehispánica, porque sirven de tributo y honra a la tierra que provee.
#JuevesDelSilencio con la procesión de Jesús Nazareno de los Milagros, marca el primer jueves de Cuaresma previo a la #SemanaSantaGTPatrimonioHumanidad.#3milAñosRiquezaCulturalGT#CulturaGUATE pic.twitter.com/3H884GAmM8
— Ministerio de Cultura y Deportes (@McdGuate) February 24, 2023
Variantes
El huerto es una variante de altar, que se aprecia en el interior de los templos o en las casas. Se caracteriza porque combina múltiples elementos: una alfombra de aserrín con marco de frutas, hortalizas y flores. Regularmente, estos productos naturales provenientes de la cosecha de la temporada, y se presentan como ofrenda de los frutos de la tierra.
La tradición de los huertos no pertenece solo a los templos. También hay huertos y altares domésticos. Estos suelen ser elaborados en las viviendas o para el paso de los cortejos procesionales.
Una clasificación presenta los altares y huertos en tres categorías:
- De cortinas, son telas dispuestas en lienzos de diferente largo y ancho se sobreponen sobre estructuras de madera o metal. El cortinaje depende de la época litúrgica. En el caso de Cuaresma se utiliza morado, como símbolo de penitencia.
- De telones, son lienzos pintados, con una escena o temática principal, al centro de la cual se destaca la imagen de veneración.
- Altares domésticos, son elaborados en casas particulares, combinando diversos elementos; al centro se coloca la imagen de veneración o en un una escena o pasaje bíblicos.
Estas representaciones atraen a cientos de personas y alimentan el turismo, porque se convierten en verdaderas obras de arte.
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