Ciudad de Guatemala, 16 may (AGN).- ¿Puede una persona cambiar realmente? ¿Es posible la reinserción y la reincorporación social? Experiencias exitosas de reclusas demuestran que sí es posible favorecer nuevos modelos vivenciales por medio de la preparación académica y técnica.
La Unidad del Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria ha logrado que las internas del Centro de Cumplimiento de Condena para Mujeres Fraijanes I tengan acceso a formación profesional y técnica. El objetivo es prepararlas para una adecuada reinserción social, con oportunidades laborales y de desarrollo tangibles y práctica.
Este 16 de mayo, el Diario de Centro América publicó una nota periodística sobre este fenómeno positivo de transformación. El director ejecutivo de la unidad, Juan Carlos Corzo Reyes, informó que la iniciativa nació en 2016 de la mano de la Embajada de los Estados Unidos. El objetivo primordial es desarrollar en las internas valores como disciplina y amor a la enseñanza y la capacitación laboral.
En tal sentido, y para dar a conocer estas historias de éxito y transformación vital, las privadas de libertad tendrán un espacio para contar sus vivencias. El 22 de mayo se lanzará en las redes institucionales el podcast Hablar Libre, un proyecto que recoge historias reales y testimonios de cambio. Ese podcast también será replicado por decenas de sitios gubernamentales.
Conozca más del nuevo podcast “Hablar Libre”, que el Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria lanzará en los próximos días.#NuevoModeloPenitenciario #HablarLibre #Podcast #PrivadasdeLibertad #Guatemala pic.twitter.com/ADWyLswSFo
— Diario de Centro América (@DiariodeCA) May 16, 2025
Por medio de su cuenta en X, la Unidad informó:
Muy pronto, escucharás voces que rara vez se escuchan…
Y agrega:
Conozca más del nuevo podcast “Hablar Libre”, que el Nuevo Modelo de Gestión Penitenciaria lanzará en los próximos días.
Corzo Reyes dijo al respecto que desde el 2016 ya se cuenta con un producto tangible por medio del cual es posible medir la evolución de las internas. Además, cada programa será un llamado a la reflexión para los jóvenes, de que el crimen no lleva a nada bueno.
Además, la reflexión va en línea del duro aprendizaje de la pérdida de la libertad. Sin embargo, agregó Corzo, estas mujeres tienen la valentía de aceptar su error y el daño cometido, y de prepararse con miras a la reinserción social.
Así, desde 2016 el nuevo modelo de gestión penitenciaria le apunta a la humanización de los centros de privación de libertad. Un ejemplo lo constituye Fraijanes I, transformado de un centro de condena para hombres en un centro de privación de libertad para mujeres. En este, muchas mujeres aprenden oficios, comparten vivencias y se preparan para volver a la vida en sociedad.
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