Ciudad de Guatemala, 12 jun (AGN).- Este miércoles concluye el Segundo Congreso Regional Penitenciario, en el que se abordan temas cruciales para la gestión y mejora de los sistemas penitenciarios en América Latina. Para dar inicio a la agenda, Antonio Glautter de Azevedo Morais, director de Inteligencia Penitenciaria de la Secretaría Nacional de Políticas Penales de Brasil destacó los Desafíos de la inteligencia en el sistema penitenciario en un país continental.
Brasil cuenta con una vasta red penitenciaria compuesta por mil 300 unidades y una población carcelaria de 250 mil 305 personas. Esta cifra la sitúa situándose como la tercera más grande del mundo. El país enfrenta una sobrepoblación carcelaria del 32 %, lo que presenta desafíos significativos en la gestión y administración de estas instalaciones. Cada uno de los 27 estados y el Distrito Federal tiene su propio sistema para controlar las unidades penitenciarias, complicando la integración de datos a nivel nacional.
Inicia el tercer día del Congreso Regional Penitenciario, donde se realizarán las últimas conferencias y los diferentes países darán a conocer el funcionamiento del Sistema Penitenciario pic.twitter.com/FBCMvpaklW
— Lincy Rodriguez (@LincyRodriguezg) June 12, 2024
Retos y desafíos de un sistema extenso
La Dirección de Inteligencia Penitenciaria de Brasil, conocida como Dipen, se creó en 2011 con el objetivo de mejorar la coordinación y eficiencia del sistema penitenciario brasileño. Dipen incluye varias coordinaciones: inteligencia, tecnología de información, doctrina y capacitación, proyectos de innovación y cooperación internacional. Esta estructura permite una planificación y ejecución más efectivas de estrategias penitenciarias, orientadas a combatir el crimen organizado y promover la seguridad en las prisiones.
Glautter subrayó los desafíos únicos que Brasil enfrenta debido a su vasta extensión territorial y diversidad cultural. Con 8.5 millones de kilómetros cuadrados y fronteras con 10 países, la vigilancia y control de actividades ilícitas es un reto constante. Además, la diversidad demográfica, con una población de 203 millones de personas de diversas etnias y nacionalidades, agrega una capa adicional de complejidad a la gestión penitenciaria.
Políticas y estrategias
La Secretaría Nacional de Políticas Penales, a cargo del Ministerio de Seguridad Pública, desempeña un papel importante en la implementación y supervisión de políticas penitenciarias. Esta secretaría es responsable de definir directrices de política criminal y penitenciaria cada cuatro años, coordinando con gobiernos estatales y federal. Su labor incluye la evaluación periódica de establecimientos y servicios judiciales, así como la colaboración en la implementación de mejoras en el sistema penitenciario.
Una de las innovaciones que destacó Glautter fue la implementación de equipos de monitoreo electrónico, que permiten rastrear a los reclusos en tiempo real. Este sistema no solo mejora la seguridad dentro de las prisiones, sino que también facilita el control de los reclusos que tienen permisos de salida temporal o están bajo arresto domiciliario.
Brasil estableció una sólida colaboración internacional para mejorar la gestión penitenciaria. El país participa en intercambios de datos con otras naciones para identificar y monitorear a los presos extranjeros en Brasil y a los brasileños detenidos en el extranjero. Actualmente, hay 428 brasileños en cárceles en 23 países, mientras que Brasil alberga a 421 extranjeros de diferentes nacionalidades en sus prisiones.
Financiamiento y modernización
Glautter también mencionó que el gobierno brasileño destina aproximadamente mil millones de dólares anuales al sistema penitenciario. Estos fondos se utilizan para mantener las unidades penitenciarias, pagar salarios y mejorar la infraestructura mediante la compra de tecnologías avanzadas como drones y equipos de monitoreo.
La capacitación del personal penitenciario es otro aspecto clave de la estrategia de Dipen. La Escuela Nacional Penitenciaria ofrece cursos presenciales y en línea, promoviendo la formación continua de los agentes penitenciarios en técnicas modernas de gestión y seguridad.
Un logro notable del sistema penitenciario brasileño es su capacidad para anticipar y controlar disturbios y motines. La inteligencia penitenciaria juega un papel crucial en identificar posibles rebeliones y en la rápida intervención para prevenir desórdenes mayores. Este enfoque proactivo ha permitido mantener un mayor control y estabilidad dentro de las prisiones.
Resultados y eficacia de la inteligencia penitenciaria
La colaboración internacional y el uso de tecnologías avanzadas han mostrado resultados positivos en la gestión penitenciaria de Brasil. El rastreo electrónico y la recopilación de datos detallados sobre los reclusos han permitido mejorar la seguridad y la eficacia del sistema. Glautter enfatizó la importancia de estos avances, subrayando que la integración de datos es fundamental para enfrentar los desafíos del crimen organizado y la violencia dentro de las prisiones.
El segundo congreso regional penitenciario ha sido una plataforma para compartir conocimientos y estrategias en la gestión penitenciaria. La presentación de Antonio Glautter de Azevedo Morais resaltó tanto los desafíos como las innovaciones que Brasil ha implementado en su sistema penitenciario. Con una combinación de tecnología, capacitación y colaboración internacional, Brasil busca mejorar continuamente la seguridad y la eficacia de su vasto sistema penitenciario, enfrentando con determinación los retos de un país continental.
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