Redacción Ciencia, 4 feb (EFE).- Acciones como una mejor vigilancia de los agentes patógenos, una mejor gestión del comercio de animales salvajes y la caza, junto a la reducción de la deforestación, son tres medidas propuestas por un grupo de científicos para prevenir futuras pandemias.
El coste anual de estas acciones de prevención primaria de pandemias es de unos 20 mil millones de dólares (17 mil 500 millones de euros), lo que supone menos del 5 % del valor estimado de las vidas perdidas por las enfermedades infecciosas emergentes y menos del 10 % de los costes económicos.
El artículo que publica Science Adances y encabeza la Universidad de Harvard (EE. UU) defiende que estas medidas ayudarían a detener el contagio de enfermedades de los animales a los seres humanos, lo que podría ayudar a prevenir futuras pandemias y proporcionar importantes beneficios colaterales.
Tras dos años de pandemia, si algo nos ha enseñado el COVID-19 es que las pruebas, los tratamientos y las vacunas pueden evitar muertes, pero no detienen la propagación de los virus por todo el mundo y puede que nunca impidan la aparición de nuevos patógenos, destacó el líder del estudio, Aaron Bernstein, de la Escuela de Salud Pública T.H. Chan de Harvard.
Compared with earlier variants, Omicron resulted in notably lower hospitalization and death rates, leading some to conclude that the variant causes less severe outcomes https://t.co/jMk4HAORJT
— Harvard University (@Harvard) February 3, 2022
Bernstein indicó que gastar solo cinco céntimos por cada dólar puede ayudar a prevenir el próximo tsunami de vidas perdidas por las pandemias, adoptando medidas rentables que impidan que la ola llegue a surgir, en lugar de pagar billones para arreglar las cosas.
En la actualidad, se prevé que 3.3 millones de personas morirán cada año a causa de enfermedades zoonóticas virales, con un valor estimado de pérdidas por estas vidas de, como mínimo, 350 mil millones de dólares (306 mil millones de euros) y 212 mil millones (185 mil millones de euros) adicionales en pérdidas económicas directas, indica el documento.
Los autores señalan que la prevención del contagio en origen rara vez se aborda cuando los responsables políticos y las organizaciones multilaterales debaten sobre los riesgos de pandemia.
Además, acuñan un nuevo paradigma, la prevención primaria de pandemias, para definir las acciones que eliminan las nuevas enfermedades antes de que se propaguen, en lugar de las acciones que abordan los brotes de enfermedades después de que se produzcan.
Los investigadores sugieren que se cree un proyecto mundial de descubrimiento de virus para identificar posibles patógenos zoonóticos y que se proporcionen fondos y personal suficientes para vigilar el comercio de animales salvajes.
Abogan también por reducir la deforestación y señalan que disminuir la pérdida de árboles en el Amazonas es una de las piedras angulares de la prevención primaria de pandemias, aunque recuerdan que los bosques más pequeños son también importantes fuentes de patógenos emergentes debido a su proximidad a asentamientos densamente poblados.
Realizar estas inversiones en prevención reporta beneficios para la salud humana, el medioambiente y el desarrollo económico, según Marcia Castro, otra de las autores del texto y de la Escuela Chan de Harvard.
Lea también:
COVID-19: Mandatario insta a los adultos mayores de Zacapa a vacunarse
fm/dm