Ciudad de Guatemala, 20 feb. (AGN).- Durante su gira de trabajo por Bélgica, el presidente Bernardo Arévalo se reunió con guatemaltecos residentes en ese país. En el grupo de connacionales figuraba Mariela Coline, quien fue secuestrada y dada en adopción en 1986.
La historia de Mariela es la de una bebé que fue robada a tan solo 48 horas de haber nacido en el Hospital Roosevelt, en noviembre de 1986. Sin embargo, a la madre le indicaron que la bebé había fallecido, aunque nunca la dejaron ver el cuerpo.
Coline creció en una familia en Bélgica. A los 31 años, siendo ella madre y con su vida por delante, quiere conocer sus raíces y actualmente es una activista que ayuda para que otros niños que vivieron una situación similar se encuentren con su identidad.
#Hoy hace 2 años que tuve el privilegio de presentar mi libro en Guatemala con @Cescobarsarti
@JordanRodas @julioserrano
Quiero agradecer de todo corazon a mi editora Irene Piedrasanta, a quien admiro mucho y todo el equipo @E_PiedraSanta
Es un honor para mí ser parte de los… pic.twitter.com/x84T4kkXzI— Mariela SR – Coline Fanon (@SrFanon) February 17, 2024
“Mamá, no estoy muerta”
En 2020 decide contar su historia con el libro titulado Mamá, no estoy muerta. El libro ha sido traducido a varios idiomas y se encuentra disponible en preventa en Guatemala, editado por Editorial Piedrasanta.
La obra ha generado una serie de reacciones a nivel mundial, entre estas, una canción escrita por Dach Marro sobre las adopciones ilegales, la cual está por salir en Guatemala.
Sobre el libro, comenta que tiene cuatro padres, dos biológicos y dos de corazón y al ser todos víctimas, para ellos que lo escribió.
En octubre de 1987, después de un largo proceso de adopción y completar todos los requisitos de la asociación belga autorizada, los esposos Fanon reciben a su hija adoptiva, de 11 meses de edad. La llamaron Coline, a quien dieron una infancia hermosa y llena de cariño.
Ahora se reconoce como Mariela SR-Coline Fanon, al incorporar el primer nombre por ser el que le darían sus padres.
Aqui la presentación completa https://t.co/tKmQsI6bCq
— Mariela SR – Coline Fanon (@SrFanon) February 17, 2024
Su fundación
Mariela- Coline es casada y madre de dos hijos, pero fue con el nacimiento del segundo, cuando le despertó la curiosidad de indagar acerca quiénes eran sus padres biológicos.
Así comenzó la búsqueda en 2017, cuando tenía 31 años. El 30 de noviembre de ese año escribió el mensaje que le cambiaría la vida por segunda vez: “Mamá, no estoy muerta”.
Desde entonces, el encuentro con su madre biológica y su familia le han dado un giro a su vida, como a muchos otros guatemaltecos que experimentaron la misma situación.
Mariela fue una víctima más del tráfico de niños para venderlos en adopciones ilegales. Delito que comenzó una escalada en la década de 1980 y se extendió en Guatemala a lo largo de varios años.
Esta escalada se detuvo con la aprobación de la Ley de Adopciones, Decreto 77-2007, que prohibió dar a los menores al extranjero, aunque no con ello se frenaron las adopciones irregulares.
Ahora Mariela Coline preside la Fundación Raíces Perdidas desde donde promueve el encuentro de guatemaltecos adoptados en alrededor de 22 países en el mundo, con sus padres biológicos.
También busca incidir en organismos internacionales como en las Naciones Unidas, para que las adopciones ilegales se consideren un crimen de lesa humanidad.
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