Redacción Ciencia, 9 abr (EFE).- La contaminación atmosférica por partículas finas puede favorecer proliferación de mutaciones genéticas específicas de algunos tipos de cáncer de pulmón.
Esto conduce a una mayor progresión tumoral, señala una investigación publicada en Nature que describe, además, los mecanismos implicados.
Sus responsables son investigadores del Instituto Francis Crick de Londres.
Al respecto, ellos hicieron un estudio epidemiológico con datos de 32 mil 957 individuos para determinar la correlación entre partículas finas de contaminación atmosférica y cáncer de pulmón.
Para el efecto, utilizaron modelos de ratón para averiguar los procesos celulares que podrían estar detrás.
❗Es de vital importancia conocer las formas de contaminación de los alimentos por las bacterias del género #Salmonella y así reducir las infecciones
Así mismo, debemos de contar con programas de bioseguridad para evitar la contaminación por Salmonella https://t.co/TzcF4XjPSq
— aviNews América Latina -Revista (@aviNews_Latam) March 29, 2023
Componentes múltiples
La contaminación atmosférica es un cóctel de muchos componentes tóxicos.
El término PM (siglas en inglés de Particulate Matter) se usa para describir una mezcla de partículas sólidas y líquidas que se encuentran en el aire.
Estas partículas se dividen en categorías según su tamaño.
Las especialmente finas -como las PM2,5 y las PM0,1- son las más preocupantes en cuanto a efectos perjudiciales para la salud.
El aumento de la exposición a la contaminación se asocia a una mayor incidencia del cáncer de pulmón.
Una de las principales causas son precisamente esas partículas finas de 2.5 micrómetros o menos (PM2,5), que pueden penetrar profundamente en el pulmón.
La interacción entre los desencadenantes ambientales y las mutaciones genéticas asociadas a este cáncer (como las de los genes EGFR o KRAS, dos de los genes con mutaciones más frecuentes en el cáncer de pulmón no microcítico) no se conoce bien.
Liderados por Charles Swanton, el equipo investigó la relación entre la exposición a PM2,5 y la frecuencia de cáncer de pulmón en 32.957 individuos.
Estos tenían una mutación en el gen EGFR y procedían de Inglaterra, Taiwán, Corea del Sur y Canadá.
Este tipo se produce también en pacientes no fumadores.
#BoletínUNAM Los bebés que nacen en la CDMX tienen “huellas” de la contaminación atmosférica en su material genético: #ExpertaUNAM > https://t.co/K48U5KmoJw pic.twitter.com/JoreMrDerX
— UNAM (@UNAM_MX) April 5, 2023
Incidencia
Los autores informan de que la exposición a niveles crecientes de PM2,5 se asocia con una incidencia estimada creciente de cáncer de pulmón EGFR-mutante.
Por ejemplo, las observaciones de 228 individuos con cáncer de pulmón procedentes de Canadá constataron una mayor frecuencia de casos tras tres años de alta exposición a contaminantes atmosféricos PM2,5 (73 %).
Esto, frente a una baja exposición (40 %).
El estudio sugiere que tres años de exposición a altos niveles de contaminación pueden ser suficientes para que surja este cáncer, resume la revista.
Puede interesarle:
Contaminación atmosférica dificulta el apareamiento de insectos